Y por último...

... aunque no por ello sea la menos importante, os presento a:




Y seguro que ella no se molesta por haberla dejado para el final, porque es dulce, cariñosa, simpática y muy, muy optimista. Nunca se enfada; ella es así, feliz.

Desde pequeña tiene ese pelazo dorado y con esos rizos tan definidos, por eso su abuela empezó a llamarla Ricitos de Oro, y así se ha quedado, ya nadie la llama por su nombre de verdad.


Ricitos de Oro es una niña muy inquieta y bastante curiosa.
Es muy deportista, le gusta dar paseos larguísimos, hace running, spinning y aeróbic. Cada vez que tiene ocasión se apunta a una carrera popular y la verdad es que, aunque nunca gana, queda de las primeras. 

Saca muy buenas notas, sobre todo en lengua. Le encanta leer poesía e historias de ciencia ficción.
Su color favorito es el azul, ya que opina que le sienta de maravilla y hace juego con su color de pelo.
Le encanta la sopa de fideos y el zumo de naranja natural.

 
Le gusta mucho celebrar el carnaval, cada año se prepara a conciencia para ello, ya que ella misma se hace sus disfraces. Un año se disfrazó de pizza, otro año de spiderman, de taza de café, de plato de spaguettis, de super Mario, de montaña rusa con unas amigas... Ya veis que imaginación no le falta.


Es una aventurera total y le encanta la naturaleza. Hace un montón de excursiones para los pequeños del sitio donde vive y en ellas les va inculcando el amor por la naturaleza que ella siente. Así que cada dos por tres va en busca de nuevas rutas para preparar la siguiente. Y fue en una de esas rutas donde le pasó algo maravilloso...

Quereis saber qué fue lo que le pasó? Podeis averiguarlo si pinchais aquí.

Comentarios

Entradas populares