La Linda Princesa y el Valiente Caballero
En un castillo precioso de un Reino Lejano, vivía una Linda Princesa.
Estuvieron días caminando hasta que llegaron a una cueva que estaba a los pies de una enorme montaña. De esa cueva salía un aroma delicioso, así que el Valiente Caballero acompañado de los caballeros del Justo Rey, decidieron entrar a ver que ocurría.
Conforme iban avanzando el aroma se hacia más intenso, y además empezaron a ver... globos???
Todos se miraron extrañados cuando empezaron a oir una música bastante animada. Qué estaba pasando ahí?
Siguieron avanzando por la cueva hasta que llegaron a una explanada al aire libre, allí se quedaron boquiabiertos, no daban crédito a lo que veían sus ojos...
Mesas por todos lados llenas de dulces y chuches, bandejas con bocadillos, zumos, fantas, agua, cubos llenos de chocolatinas, grandes cuencos de palomitas, galletas saladas, guirnaldas y globos colgados de los arboles, un gran mesa al fondo con una enorme tarta...
Era una gran fiesta de cumpleaños!!! Era el cumpleaños del Dragón!!!
Pero, qué pintaba la Linda Princesa en todo esto?
Resulta que la Linda Princesa hacía un tiempo que había recibido un curso de repostería y organización de eventos, y se había creado una fama enorme porque hacía unas tartas, muffins, galletas decoradas, etc que quitaban el sentido, además de hacer unas mesas decoradas para fiestas preciosas.
Pues el dragón se había enterado de esa fama, y como iba a ser su cumpleaños decidió raptarla para que le organizará su fiesta, en lugar de pedírselo amablemente... Así son los dragones.
Menos mal que la Linda Princesa era muy amable y accedió a organizarle la fiesta aunque no se lo hubiese pedido de buenas maneras.
En cuanto se hubo aclarado la situación, todos disfrutaron de la fiesta. De hecho, desde ese día, el Justo Rey, cada vez que organizaba una fiesta, invitaba a los dragones del reino.
Y así todos, todos, todos, fueron felices en el Lejano Reino.
Os tengo que contar que esta Linda Princesa y este Valiente Caballero estan hechos siguiendo los patrones de Lanas y Ovillos. Pasaros por su web porque tiene cosas preciosas!
Y ya de paso, animaros a tejer alguna!!
En el mismo reino, vivía un Valiente Caballero.
Un día el Justo Rey dió una fiesta en el castillo y la Linda Princesa y el Valiente Caballero se conocieron y estuvieron bailando toda la noche. Que si un tango, un cha-cha-chá, unas sevillanas, un poco de bachata...
Después de tanto baile, salieron al balcón de palacio, que tenía unas vistas impreionantes a los jardines y estuvieron hablando un buen rato.
Después de tanto baile, salieron al balcón de palacio, que tenía unas vistas impreionantes a los jardines y estuvieron hablando un buen rato.
Más tarde tomaron mojitos y caipirinhas y a la hora de la recena tomaron un caldito acompañado de croquetas de jamón y pollo.
Fue una fiesta muy larga y tan intensa que se les hizo corta.
Al día siguiente quedaron a tomar un café.
Y al día siguiente quedaron a tomar un café con magdalenas.
Y al día siguiente quedaron a tomar un café con magdalenas y bizcocho.
Y al día siguiente quedaron también a tomar algo, pero el Valiente Caballero se quedó de piedra al ver como pasaban los minutos y la Linda Princesa no aparecía.
Pero se quedó más petrificado cuando al cabo de casi una hora llegó un mensajero del Justo Rey diciendo que la Linda Princesa no podía acudir a la cita porque un dragón se la había llevado!
Ya sabéis lo que pasa en los reinos lejanos, que todos tienen caballeros, princesas, reyes, brujas, dragones... Y este no iba a ser menos.
Pues el Valiente Caballero no dudó ni un segundo en ir a hablar con el Justo Rey para que le explicara la situación y poder ir a rescatar a la Linda Princesa.
El Justo Rey le contó que al ir a despertar a la Linda Princesa vieron que no estaba en su cama. El balcón estaba abierto y justo en el suelo encontraron la escama de un dragón, así que habían supuesto que se la había llevado el dragón del reino.
El Justo Rey le contó que al ir a despertar a la Linda Princesa vieron que no estaba en su cama. El balcón estaba abierto y justo en el suelo encontraron la escama de un dragón, así que habían supuesto que se la había llevado el dragón del reino.
El Valiente Caballero decidió entonces ir a por la Linda Princesa de inmediato y el Justo Rey quiso que fuera acompañado por sus mejores caballeros por si las moscas...
Y así fue como el Valiente Caballero emprendió su cruzada en busca del dragón para rescatar a su Linda Princesa.
Estuvieron días caminando hasta que llegaron a una cueva que estaba a los pies de una enorme montaña. De esa cueva salía un aroma delicioso, así que el Valiente Caballero acompañado de los caballeros del Justo Rey, decidieron entrar a ver que ocurría.
Conforme iban avanzando el aroma se hacia más intenso, y además empezaron a ver... globos???
Todos se miraron extrañados cuando empezaron a oir una música bastante animada. Qué estaba pasando ahí?
Siguieron avanzando por la cueva hasta que llegaron a una explanada al aire libre, allí se quedaron boquiabiertos, no daban crédito a lo que veían sus ojos...
Mesas por todos lados llenas de dulces y chuches, bandejas con bocadillos, zumos, fantas, agua, cubos llenos de chocolatinas, grandes cuencos de palomitas, galletas saladas, guirnaldas y globos colgados de los arboles, un gran mesa al fondo con una enorme tarta...
Era una gran fiesta de cumpleaños!!! Era el cumpleaños del Dragón!!!
Pero, qué pintaba la Linda Princesa en todo esto?
Resulta que la Linda Princesa hacía un tiempo que había recibido un curso de repostería y organización de eventos, y se había creado una fama enorme porque hacía unas tartas, muffins, galletas decoradas, etc que quitaban el sentido, además de hacer unas mesas decoradas para fiestas preciosas.
Pues el dragón se había enterado de esa fama, y como iba a ser su cumpleaños decidió raptarla para que le organizará su fiesta, en lugar de pedírselo amablemente... Así son los dragones.
Menos mal que la Linda Princesa era muy amable y accedió a organizarle la fiesta aunque no se lo hubiese pedido de buenas maneras.
En cuanto se hubo aclarado la situación, todos disfrutaron de la fiesta. De hecho, desde ese día, el Justo Rey, cada vez que organizaba una fiesta, invitaba a los dragones del reino.
Y así todos, todos, todos, fueron felices en el Lejano Reino.
Os tengo que contar que esta Linda Princesa y este Valiente Caballero estan hechos siguiendo los patrones de Lanas y Ovillos. Pasaros por su web porque tiene cosas preciosas!
Y ya de paso, animaros a tejer alguna!!
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